Todos sabemos que la vida puede ser un torbellino de agendas apretadas, plazos y responsabilidades. A veces parece que no queda tiempo para respirar, y mucho menos para cocinar comidas sanas.
Pero cocinar tus propios platos es importante si quieres mantenerte sano. No sólo te ahorra dinero, sino que también te permite controlar lo que comes.
Si cocinas tú mismo, puedes elegir ingredientes frescos y saludables y evitar los azúcares, sales y grasas ocultos que a menudose encuentran en la comida para llevar o en los alimentos procesados.
Afortunadamente, encontrar tiempo para cocinar comidas sanas no es tan difícil como crees. Con un poco de planificación y algunos trucos sencillos, puedes preparar comidas deliciosas y nutritivas en un abrir y cerrar de ojos.
Aquí tienes 10 trucos que te cambiarán la vida y harán que cocinar en casa sea pan comido, incluso si estás muy ocupado.
Prepara la comida
¿Has oído hablar de la preparación de comidas? ¡Cambia las reglas del juego!
Dedicando unas horas del fin de semana a preparar las comidas de la semana, puedes ahorrar tiempo en los ajetreados días laborables.
Planifica las comidas, haz la compra y, a continuación, cocínalas y guárdalas en la nevera o el congelador. Así, cuando estés ocupado o cansado, tendrás una comida sana lista para llevar.
Compra a granel
Una forma sencilla de ahorrar tiempo es comprar a granel. Al comprar grandes cantidades de alimentos básicos como arroz, pasta, productos enlatados y verduras congeladas, puedes reducir las compras y tener siempre ingredientes a mano.
Además, los productos a granel suelen ser más baratos por unidad, por lo que también ahorrarás dinero. Eso sí, ¡guárdalos bien para que se mantengan frescos!
Haz un lote doble
Otro truco para ahorrar tiempo es hacer una doble o incluso triple tanda de comidas.
Ya sea un guiso, una sopa o un salteado, si preparas más cantidad de la que necesitas, tendrás sobras para otro día. De este modo, no cocinas sólo para una comida, sino al menos para dos o tres.
Yo suelo cocinar a granel tanto el plato principal como los acompañamientos, lo que también me da opciones para mezclar un poco mis comidas.
Aprovecha el congelador
Si cocinas a granel, ¿por qué no congelas algunas porciones para más tarde? Si lo haces, siempre tendrás una comida casera lista para calentar y comer. Incluso he congelado pastel de chocolate y tarta de manzana y los he utilizado cuando necesitaba un postre rápido.
Además, muchas frutas y verduras se pueden congelar sin que pierdan su valor nutritivo.
Puedes dar un paso más en la preparación de tus comidas y preparar más verduras (e incluso carnes) de las que necesitas para tu receta. Así, la próxima vez que necesites pollo en rodajas o cebolla en dados, sólo tienes que sacarlos del congelador.
Aprovecha las sobras
No dejes que esas sobras se desperdicien. Con un poco de creatividad, puedes convertirlas en una comida totalmente nueva.
Por ejemplo, las sobras de pollo asado se pueden utilizar en una ensalada, una sopa o un sándwich al día siguiente. Del mismo modo, las verduras sobrantes se pueden mezclar en un salteado o utilizar como ingrediente de una pizza. Una nueva idea que he descubierto recientemente es utilizar las sobras en wraps.
Las posibilidades son prácticamente infinitas, así que antes de tirar esas sobras, piensa en cómo puedes darles un nuevo uso.
Aprovecha las comidas de una sola olla
Las comidas de una sola olla son otra forma estupenda de ahorrar tiempo en la cocina y la limpieza.
Como su nombre indica, se trata de comidas que pueden cocinarse en una sola olla. Piensa en estofados, currys, pastas y guisos. Mi favorito es este pilaf de cebollas doradas y verduras de primavera de Olive Magazine.
Hay un montón de recetas deliciosas entre las que elegir, y no sólo son fáciles de hacer, sino que también aportan mucho sabor cuando todos los ingredientes se cocinan juntos.
Prueba las sartenes
Si estás buscando una manera rápida y fácil de cocinar, no busques más allá de las sartenes. Se han convertido en un elemento básico en nuestra casa, y probamos una o dos recetas nuevas al mes.
Lo bueno de las comidas en sartén es que puedes simplemente echar las proteínas y verduras que elijas en una sartén, rociarlas con un poco de aceite y condimentos, y hornear. En menos de una hora, tendrás una comida deliciosa y nutritiva lista para servir.
Además, la limpieza es muy fácil, ¡sólo hay que lavar una sartén!
Cocina con una olla de cocción lenta
Las ollas de cocción lenta son un regalo del cielo para los que están siempre ocupados. Estos prácticos electrodomésticos te permiten preparar la comida por la mañana, programar el temporizador y volver a casa con la cena totalmente hecha.
Desde sopas y estofados hasta asados y guisos, las ollas de cocción lenta pueden con todo. Además, son ideales para cocinar a granel, lo que le permite tener sobras para los próximos días o congelar para futuras comidas.
Consigue una olla instantánea
Otro aparato de cocina que puede revolucionar tu rutina culinaria es la Olla Instantánea. Esta olla múltiple puede actuar como olla a presión, olla de cocción lenta, olla arrocera y más, por lo que es una adición versátil a su cocina.
Con una olla Instant Pot, puede cocinar comidas en una fracción del tiempo que tardaría en la estufa o en el horno. Además, muchos modelos vienen con una función de inicio retardado, lo que le permite tener su comida lista exactamente cuando lo desee.
Pruebe los servicios de reparto de comidas
Si no le apetece cocinar, pruebe un servicio de reparto de comidas. Estos servicios entregan ingredientes predosificados y recetas fáciles de seguir directamente en la puerta de tu casa, eliminando las conjeturas a la hora de planificar las comidas y hacer la compra.
Hay un sinfín de opciones que se adaptan a distintas preferencias y necesidades dietéticas. Por ejemplo, Fresh N
- Fresh N Lean
- Delantal Azul
- HelloFresh
- Chef Verde
- Purple Carrot
Muchos de estos servicios ofrecen planes flexibles que te permiten elegir cuántas comidas quieres a la semana.
¿Listo para empezar a cocinar?
Con trucos como dedicar tiempo a la preparación de comidas una vez a la semana, cocinar lotes más grandes, utilizar las sobras de forma creativa y experimentar con las sartenes y las comidas de una sola olla, puede reducir significativamente el tiempo y el esfuerzo necesarios para preparar comidas saludables.
También puedes aprovechar la tecnología y hacerte con una olla de cocción lenta o una Instant Pot para tener la cena lista exactamente cuando tú quieras. Y si cocinar no es lo tuyo en este momento, un servicio de reparto de comidas puede ayudarte a sobrevivir a los momentos de más trabajo.
¿Estás listo para empezar?