Si se hiciera una encuesta sobre por qué la gente come comida basura en lugar de comida sana, la respuesta sería unánime:
La comida rápida o los alimentos poco saludables saben mejor que los sanos.
La buena noticia es que estas personas están equivocadas.
No es que la comida sana sepa mal o no sea sabrosa, sino que a menudo se prepara de forma incorrecta. Como resultado, resultan insípidos y poco apetitosos.
Si quieres convertir tu dieta saludable en una extravagancia de sabor, estos son los consejos que debes seguir.
¡Compartimos contigo 9 consejos para que la comida sana sepa mejor!
1. Cocine las verduras a la plancha o asadas y elíjalas bien
Si su método preferido para cocinar las verduras es hervirlas o cocerlas al vapor, es hora de cambiar. Estos métodos de cocción tienden a eliminar el sabor de las verduras y las dejan blandas y poco apetecibles.
En su lugar, opta por saltearlas, asarlas o asarlas a la parrilla.
Saltear las verduras consiste en cocinar los ingredientes a fuego alto con un poco de aceite y muchos aromáticos como el ajo o la cebolla. De este modo, se mantiene la textura crujiente (y los nutrientes) de los alimentos y se les añade mucho sabor.
Lo mejor del asado es que permite que los azúcares naturales de las verduras florezcan, haciéndolas más dulces. Las mejores verduras para este método de cocción son las más resistentes:
- tubérculos
- patatas
- coles de Bruselas
- coliflor
- brócoli
Por otro lado, asar las verduras a la parrilla intensifica su sabor. Tanto en verano como en invierno, las siguientes verduras te vendrán muy bien:
- pimientos
- calabacín
- tomates
2. Marinar los alimentos
Si tiene la sensación de que las especias y las hierbas se quedan encima de los alimentos en lugar de ser absorbidas por ellos, hay un truco que puede utilizar:
Crea un adobo con tus hierbas y especias y sumerge tus verduras o carnes en él.
Las verduras blandas no tienen que marinarse durante demasiado tiempo: una media hora bastará. Las verduras más fibrosas o con más almidón pueden marinarse durante una hora o más. La carne suele marinarse durante varias horas en el frigorífico.
Ahora bien, marinar los alimentos puede parecer un poco engorroso, ya que hay que empezar a preparar la comida antes. Sin embargo, una vez que lo pruebes, podrás apreciar cuánto más sabor añade este método a tus comidas.
3. Añada aromáticos salteados
Si alguna vez piensa que a un plato le vendría bien un poco más de sabor, considere la posibilidad de añadirle aromas salteados.
Las mejores opciones son ajo, cebolla, chalotas, cebolletas y puerros. Estos ingredientes no sólo tienen un olor penetrante, sino que también aportan sabores sorprendentes y complejos a la comida.
Calienta un poco de aceite en la sartén y cocina estos aromáticos ingredientes hasta que estén transparentes. Asegúrese de no pasarse o acabará con sabores amargos. Añada el resto de los ingredientes y cocine según las instrucciones.
Si quiere reducir la cantidad de sal añadida al plato, añada más aromáticas de las indicadas. Los sabores fuertes ayudarán a enmascarar la falta de sal. Y si quieres cocinar sin aceite, saltea las verduras en un poco de agua en su lugar.
4. Sazona tu comida generosamente
Si tu comida sana sabe insípida, significa que no la has condimentado lo suficiente.
Hay muchas ideas equivocadas sobre cómo sazonar la comida. Mucha gente cree que la sal y la pimienta son la única manera de hacerlo. Y, como la mayoría de la gente intenta reducir el consumo de sal, no se añade tanta sal a los platos.
Pero, en realidad, hay muchas maneras de sazonar la comida de forma saludable.
Algunos condimentos increíbles son
- ajo en polvo
- cebolla en polvo
- pimentón ahumado
- pimienta de cayena
- canela
La lista es interminable.
Además de que hay muchas opciones de condimentos, tampoco debes contenerte con las cantidades. Añade la cantidad que necesites para que tu plato tenga buen sabor.
En caso de que no tenga tiempo o paciencia para medir y mezclar varias especias, utilice una marca como Bearded Butchers Seasoning para disfrutar de sabores premezclados.
Lo mejor de todo es que hay muchos tipos de condimentos entre los que elegir. Así que, no importa si estás haciendo comida cajún o carne a la barbacoa – habrá algo para todos.
5. Reforzar el sabor con ácidos
¿Te has preguntado alguna vez cómo consiguen los chefs profesionales que su comida sepa tan bien? Pues conocen un arma secreta: ¡los ácidos!
Los ácidos más comunes son
- zumo de limón
- vinagre
- yogur
- nata agria
- tomates
- e incluso vinos.
Estos ingredientes ayudan a dar brillo a los alimentos, ablandan la carne e incluso permiten que los sabores se filtren en los alimentos.
En el caso de la carne, los ácidos son especialmente útiles durante la fase de marinado. Por eso, añada un poco de yogur o zumo de limón a sus adobos y disfrutará de una carne más suave y sabrosa. Un vinagre con poco sabor también puede servir.
Si a tus ensaladas les falta algo, prueba con un chorrito de zumo de limón o vinagre balsámico.
¿Necesitas alegrar bases como el arroz, la quinoa o el cuscús? El zumo de lima o de limón hace maravillas.
Si alguno de tus platos parece no tener gracia, un poco de zumo de limón o unas gotas de vinagre blanco también pueden marcar la diferencia.
6. Pruebe a cocinar con aceite de oliva aromatizado
Como sabrás o no, el aceite de oliva es uno de losaceites más saludables que puedes utilizar. Por lo tanto, si desea freír, asar, o utilizar aceites para aderezos de ensaladas y más, este es el aceite para llegar a.
Si lo que busca es potenciar el sabor y reducir la necesidad de utilizar demasiado aceite, su solución es el aceite de oliva con hierbas o ajo.
Lo mejor de todo es que puedes hacerlo tú mismo. Aquí tienes las dos mejores maneras de hacerlo:
Con un miniprocesador de alimentos
Mida aproximadamente ½ taza de aceite de oliva y varias ramitas de sus hierbas favoritas. También puede añadir especias enteras tostadas si lo desea. Ponga todos los ingredientes en su miniprocesador de alimentos y bátalos hasta que estén completamente mezclados. A continuación, déjelo reposar durante una hora.
Vierta el aceite en una botella a través de un colador, separándolo del sedimento de hierbas. A continuación, rellénalo con una taza y media de aceite de oliva. Vuelve a taparlo y podrás guardarlo hasta dos meses.
Con calor
Vierte dos tazas de aceite de oliva en una cacerola y caliéntala a fuego lento. Añade al aceite las hierbas y especias que hayas elegido y déjalas reposar durante dos minutos. Apaga el fuego y deja reposar las hierbas hasta dos horas. Colar en una botella y guardar hasta dos semanas.
7. Mejore las ensaladas con quesos saludables
A menos que sea un fan incondicional de las ensaladas, éstas pueden ser un plato difícil de incorporar a su dieta diaria. Aunque un aliño adecuado y un aceite de oliva aromatizado pueden ayudar mucho a potenciar el sabor, es posible que sienta que aún le falta algo.
Si es así, utiliza quesos saludables para darle un toque especial.
Para minimizar el sodio, las calorías y la grasa, utilice quesos como:
- feta
- mozzarella fresca
- queso azul
- ricotta
8. Añadir cremosidad con puré de coliflor
Si quieres añadir cremosidad a la pasta o a otros platos, la nata espesa puede parecer a menudo la única opción. Por supuesto, este ingrediente es muy perjudicial para la salud. Afortunadamente, el puré de coliflor es un excelente sustituto y, además, ¡añade muchos sabores!
Para preparar puré de coliflor, cuece los ramilletes cortados en agua o caldo de verduras. Una vez hechos, pásalos a la batidora. Añade el caldo de verduras, el ajo salteado, un poco de sal, pimienta y leche vegetal. Tritura hasta que se forme una pasta parecida a una crema. Luego, añade esto al plato que necesite una buena base de crema.
9. No te olvides de la textura
Lo creas o no, la textura puede desempeñar un papel importante en el placer que encuentres en tu comida. Después de todo, imagínese si tuviera que comer sólo guisantes blandos o carne dura el resto de su vida: se sentiría muy mal, ¿verdad?
Para que tus comidas sigan siendo interesantes, juega con las texturas.
Por ejemplo, añadir un queso más suave a una ensalada crujiente puede hacer maravillas. O añade granos de granada a la quinoa.
¿Quieres darle un toque especial a tus verduras? Añade unos frutos secos tostados para darle sabor y un toque crujiente. Por no hablar de que también hará que las verduras sean más saciantes.
Cuando prepares un plato, presta atención a su textura general. Después, busca formas de cambiarla. Una vez más, se sorprenderá de la diferencia que esto puede suponer para sus platos saludables.
9 formas de hacer que la comida sana sepa bien, para terminar
Comer sano no significa que tenga que ser insípido. Como puede ver, hay muchas formas de ser creativo con ingredientes más saludables. Así que asegúrate de incorporar estos consejos y trucos en casi todas las comidas que prefieras.
Con el tiempo, se encontrará utilizando automáticamente estas técnicas en su comida. Entonces, ¡se dará cuenta de cómo hacer que la comida sana sepa deliciosa sin ningún esfuerzo!
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PREGUNTAS FRECUENTES
How do you train your taste buds to like healthy food?
Training your taste buds to like healthy food can be done by gradually introducing new foods into your diet. Start by adding small amounts of healthy food to your regular meals, such as freshly cut fruits and vegetables, nuts, whole grains, and legumes. As you get used to these new flavors and textures, you can increase the amount of healthy food that you consume. Additionally, try to experiment with different cooking techniques, such as grilling or baking, rather than always relying on unhealthy fried foods. Finally, make sure to listen to your body’s signals – if certain foods don’t seem appealing after a few tries then it is best to move on and find other nutritious options that are more enjoyable for you. With time and patience, it is definitely possible to train your taste buds to appreciate healthier meals.
What can I add to food to make it taste better?
There are many different things you can add to food to make it taste better. Herbs and spices can be used to bring out the flavor of a dish, while sauces and condiments such as mustard, ketchup, and mayonnaise can add a kick of flavor or texture. You can also incorporate vegetables or fruits into your meals for added nutrition and flavor. For example, I usually add apples to a pork roast or mushrooms to a sauce can really elevate the taste of the dish. Another great way to enhance the flavor of food is by using stocks and broths as a base for soups and gravies. Finally, adding a bit of butter or extra-virgin olive oil can make all the difference when it comes to bringing out the natural flavors in any dish.
Can healthy food taste good too?
Yes, healthy food can taste good too! Eating healthy does not mean sacrificing flavor and enjoyment. In fact, many nutritious dishes are delicious and satisfying. For example, a spicy stir-fry of vegetables cooked in olive oil is both flavorful and healthy. Or try roasting root vegetables such as beets and sweet potatoes for an easy and delicious side dish. You can also make delicious smoothies with fruits like bananas and berries, or create your own unique salad with fresh greens and crunchy nuts. With a little creativity and experimentation, you can find plenty of tasty ways to enjoy healthy meals!