Todos tenemos esos alimentos reconfortantes, que quizá no son ideales para nuestra salud y belleza -¿alguien quiere ver aumento de peso y manchas? – pero que nos gustan mucho y pueden hacernos sentir mejor cuando las cosas no van tan bien. Entonces, ¿tenemos que renunciar a ellos para estar sanos? No necesariamente. Es perfectamente posible hacer que la mayoría de nuestros platos favoritos sean un poco (o un mucho) más saludables con unos sencillos retoques, como verás a continuación.
1. Abra los brazos a la freidora de aire
Si quiere poder cocinar los alimentos que más le gustan y que satisfacen su apetito mejor que la comida dietética media, entonces una cosa que necesita absolutamente en su cocina es una freidora de aire.
La freidora de aire es una gran herramienta que le permite transformar sus comidas favoritas, no tan saludables, en platos dietéticos y saludables. Desde patatas fritas crujientes a alitas de pollo doradas, o incluso este pollo a la parmesana para freír que a todo el mundo le encantará, puedes seguir disfrutando de tus platos favoritos sin tener que preocuparte de cómo te queda la ropa o si toda esa grasa hará que te salga la piel. Es una inversión brillante.
2. Cambia la nata por yogur griego
La próxima vez que busques nata espesa para añadir un toque de riqueza a tus platos de pasta y sopa, cámbiala por yogur griego. Este sencillo cambio le permitirá obtener la textura y el sabor cremosos, ricos y ligeramente picantes que busca, al tiempo que le aporta una dosis beneficiosa de probióticos y reduce las calorías. También está lleno de proteínas que son excelentes para la piel.
3. Adopta los cereales integrales
No hay nada más sencillo que cambiar los cereales refinados, como el arroz blanco, por versiones integrales . Al hacerlo, añadirás más fibra a tus comidas, te saciarás durante más tiempo y podrás seguir comiendo ese arroz con pollo o esa pasta al pesto que tanto te gustan. Créeme, ¡tu piel y tu cintura también te lo agradecerán!
4. La magia de las hierbas
Cuando se trata de añadir sabor sin añadir muchas calorías y, al mismo tiempo, garantizar que tu cuerpo recibe tantos nutrientes saludables y beneficiosos para la belleza como sea posible, no hay nada mejor que los beneficios mágicos para la salud de las hierbas y las especias. No sólo elevan el sabor, sino que hierbas como la cúrcuma y la canela vienen con potentes beneficios para la salud y la belleza, como una piel menos inflamada, por lo que no puedes perder por usarlas más en tu cocina.
5. Platos vegetarianos
Añade una colorida variedad de verduras a tus platos favoritos. Es una forma fácil y divertida de aumentar el contenido nutricional de tu comida, añadiendo vitaminas y minerales esenciales que fomentan una piel y un pelo bonitos al mismo tiempo.
6. Apóyate en proteínas magras
Sustituye las carnes más grasas por proteínas magras como el pavo, el pollo o el pescado. Estas proteínas aportan nutrientes esenciales sin grasas añadidas, ayudan a mantener un peso saludable y favorecen la salud de la piel, al tiempo que permiten disfrutar con moderación de platos como las hamburguesas con queso y el pollo al curry katsu.
Disfruta de alimentos sanos
Tomando algunas decisiones inteligentes, puedes seguir disfrutando de todas las comodidades de tus platos favoritos sin las calorías ni las preocupaciones por la piel, así que ¿a qué esperas? ¡Es hora de ponerse a cocinar!